VISUALES: Naturalezas Interiores de Reynier Borrell

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Ysabel Muñoz Martínez
En reciente entrevista, el destacado artista de la plástica cubana Tomás Sánchez señalaba las tres líneas fundamentales de su obra: arte, naturaleza y meditación. Esta tríada es también el hilo que conduce a Reynier Borrell (Trinidad, 1988), aunque con una aproximación muy diferente. El joven pintor, contrapuesto a los espacios de verde barroquismo que predomina en el experimentado Sánchez, regala una naturaleza que encuentra su mejor lugar en el ojo del espectador, sobrecogido por la imagen desnuda de artificios y cargada de una fuerza esencialmente poética.
Los elementos que Reynier toma de la naturaleza evocan la soledad de días como estos, en una lucha pujante del ser que busca paz y equilibrio al interior. El ambiente en su obra no parece conectarse con mundos exteriores, más bien ofrece un universo único, individual y en gran medida reflexivo. Con la paciencia de la roca mineral y el estoicismo del árbol aislado, llegan de su mano paisajes celestiales, en cuya aparente calma puede leerse entre trazos una lucha descarnada por hallar serenidad e identidad. De su trayectoria, el curador y especialista de artes visuales Atner Cadalzo expresa: «Ligereza, transparencia y silencio son las palabras que inmediatamente surgen al contemplar sus trabajos. Su discurso, de aparente simplicidad, se va descubriendo entre las intuiciones de los motivos elegidos, en la sutil asimetría de las composiciones y en la perfecta adecuación entre los temas y sus técnicas de representación».
A este promisorio artista trinitario, graduado de la Academia de Artes Plásticas de la ciudad en 2007, dedicamos el espacio VISUALES, como una grata invitación a guardar la calma en el contexto de crisis no solo sanitaria y climática, sino también de grandes conflictos hacia adentro, hacia el ser que debe repensarse a sí mismo.
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Gracias mil,doy al equipo de trabajo en especial a Isabel Muñoz y a Luis Orlando.Por añadir vida a estos difíciles días .Un abrazo
Mucha suerte en su carrera. He seguido su obra y cada día me gusta más.