
Por: Gelson Elian Águila Jiménez
Cerca de cumplir los 37 años de fundado y bajo la dirección de su presidenta actual, Nery de la Caridad Zayas Arrachea, el club trinitario «Amigos del danzón» Julio Cuevas Díaz actualmente cuenta con la participación de 103 miembros. Se alza como uno de los grupos fundamentales que permiten rescatar y mantener la vigencia de «su majestad el danzón» como cariñosamente se refieren a él.
En pos de cumplir con su cometido, el Club despliega, en conjunto con la Casa de Cultura de la ciudad, sede del proyecto, una amplia variedad de actividades para acercar la tradición danzonera de la isla a la población.
Se destaca el trabajo de apoyo que ejercen —en conjunto con los metodólogos de la Casa de Cultura— para enseñar el baile a todos los interesados, desde los más pequeños hasta los más veteranos. Sirve para recrear, a manera de gala y agasajo, los «años de oro» en los que el danzón inundaba toda nuestra geografía.
El club del danzón de Trinidad realiza visitas al hogar de ancianos «Esperanza de vivir» en el cual hacen presentaciones a los abuelos; celebraciones colectivas de cumpleaños, juegos de participación, algunos para entrenar la memoria, y adivinanzas. En cada una de estas iniciativas premian a los ganadores con artículos elaborados por el taller de confección que los propios miembros del club también organizan.
Otras de las acciones de los socios del club se centran en los trabajos con las comunidades, y llevar su arte a los círculos infantiles, escuelas primarias, secundarias y preuniversitarios en los que además son requeridos en celebraciones de efemérides y matutinos especializados. Consiguen, con su labor, crear conciencia desde edades tempranas sobre la importancia que tiene la preservación de un baile patrimonial cubano como lo es el danzón.
La excelencia del Club y de sus miembros se ratifica en las competiciones nacionales que se realizan cada año y en las que «Amigos del danzón» lleva cinco años consecutivos alcanzando el primer puesto. La calidad de sus habilidades técnicas para el baile y la dedicación de cuidar hasta el más mínimo detalle estético tan característico de este baile de salón son garantías indiscutibles.
Según palabras de Nery Zayas: «el danzón es una gran familia sin lugar a dudas». El Club les ha permitido crear un espacio en el que es posible recordar sus tiempos de juventud, celebrar y compartir el gusto por el baile, salir de la rutina diaria, hacer nuevos amigos, reforzar sus matrimonios y hasta reencontrar el amor. Como es el propio caso de Nery que conoció a su actual esposo gracias a los espacios danzoneros y llevan juntos treinta años de matrimonio y numerosos reconocimientos nacionales e internacionales como pareja de baile.
«Amigos del danzón» se reúne cada primer y tercer domingo del mes a las 3:00 pm en la Casa de Cultura de Trinidad, la cual abre sus puertas para recibir a cualquier interesado en formar parte del club o simplemente pasar la tarde disfrutando de la buena música y de ver bailar a las parejas.
El contexto trinitario siempre ha sido un gran continente de tradiciones, folclor, arte y patrimonio. No es de extrañar que existan organizaciones con una labor tan noble y hermosa como esta que se encarguen de reconocer, rescatar y transmitir a la población la importancia y belleza de un baile tradicional y símbolo de la nación cubana como lo es el danzón. Recordemos que en el 17 de febrero de 1990 sesionó en nuestra ciudad el Encuentro Nacional del Danzón.
El compromiso de Trinidad con la cultura y la preservación patrimonial crece cada día y se ratifica gracias al trabajo de personas como estas que no permitirán jamás que muera el espíritu danzonero, no solo en la otrora villa del centro, sino también en toda Cuba.