Restauradores de papel conservan la memoria histórica de Trinidad

Patricia Lazo Rodríguez
Bessie Rodríguez Landestoy
Siete estudiantes integran el grupo de Restauración de Papel de la escuela de oficios “Fernando Aguado y Rico” de la Oficina del Conservador de Trinidad. El plantel escolar acogió la nueva especialidad con un programa de estudio desarrollado en modalidad técnica y actividad práctica. Ambas, permitieron el intercambio con especialistas y restauradores documentales de la ciudad, tanto del Archivo Histórico Municipal como del Centro de Documentación “Casa Malibrán”.
En jornadas de trabajo alternas con las clases, los alumnos colaboraron en la mejora de la base material de estudio de la escuela primaria José Martí. Para ello, realizaron acciones de conservación, limpieza manual y encuadernación. Las técnicas de costura más empleadas fueron la pata de gallina y el cocido japonés de cuatro puntos.

Asimismo, en el Archivo Municipal restauraron documentos de alto valor documental de los siglos XVIII, XIX y XX en los que sobresalen las actas de matrimonio de familias trinitarias. Para una mejor organización y localización de estos documentos, se agruparon todos en un gran libro.

El periódico Escambray del siglo XIX también fue intervenido documentalmente mediante acciones de restauración. Se organizaron por fecha y año para posibilitar una búsqueda más rápida y eficiente.

A los libros archivados se les otorgó especial atención. Se crearon cajas en pequeños formatos para resguardarlos del polvo y otras amenazas ambientales tanto internas como externas. Durante la restauración de planos centenarios de la ciudad, los educandos han desarrollado habilidades manuales y cognoscitivas. En el Centro de Documentación del Patrimonio utilizaron diferentes herramientas y materiales como la espátula térmica, brochas, mesa de luz, papel cebolla, alba y bom.

Estos jóvenes, todos con aptitudes y habilidades creativas en la conservación y mantenimiento de la memoria histórica, están trabajando en los proyectos finales de graduación. Entre ellos se destacan la restauración de importantes periódicos de la época, así como protocolos notariales de actas de divorcio, poderes generales y construcciones de obras nuevas. Durante los dos años de carrera han dejado una huella significativa en la salvaguarda del patrimonio documental.